Jaime Gil Aluja, Presidente de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras (RACEF), presenta las novedades de la Escuela de Economía Humanista de Barcelona y esboza sus orígenes y trayectoria en un artículo publicado ayer domingo, 7 de septiembre, en el suplemento económico "Dinero", del diario "La Vanguardia". La Real Corporación sostiene el legado de una línea de investigación que prima la prosperidad compartida y los métodos de análisis no mecanicistas.

El Académico asegura que la Escuela de Barcelona se ha consolidado como un referente internacional en el ámbito de las ciencias económicas y sociales, situándose al nivel de escuelas históricas como la Neoclásica, la Historicista Alemana o la de Viena. En la actualidad, trabaja en el desarrollo de algoritmos innovadores que buscan ofrecer alternativas prácticas a los problemas actuales, desde la sostenibilidad y el cambio climático hasta la reconfiguración del orden mundial y los desafíos de la Unión Europea.

Impulsada por la colaboración de nueve premios Nobel y jóvenes científicos europeos, la Escuela de Barcelona propone superar el paradigma mecanicista neoclásico, que concebía al ser humano como un agente económico sin alma. Entre sus aportaciones destaca la incorporación de la lógica difusa de Lofty Zadeh y los avances de Daniel Kahneman sobre la influencia de emociones y razones en la toma de decisiones, así como las teorías de predictibilidad de Finn Kydland, explica Gil Aluja.

El Presidente de la RACEF señala que el origen de esta visión se remonta a la experiencia de profesionales y académicos que comprobaron la insuficiencia de los modelos clásicos para resolver problemas reales, diseñando incluso algoritmos aplicados a la gestión empresarial. Hoy, la Escuela de Economía Humanista de Barcelona se presenta como un espacio de investigación y debate abierto a jóvenes académicos y científicos de toda Europa, invitando a sumarse a un proyecto que busca situar la dignidad humana en el centro de la economía del futuro.