El Rector de la Universidad de Cantabria, Ángel Pazos, apunta las acciones que están llevando a cabo diversos departamentos del centro para luchar contra la Covid-19 y sus consecuencias en la sociedad y la economía en su discurso de apertura del Acto Nacional que la Real Accademia de Ciencias Económicas y Financieras (RACEF) celebrará junto a la propia universidad celebrarán de forma telemática los próximos 7 y 8 de mayo.
DISCURSO DE APERTURA DE LA SESIÓN ACADÉMICA CONJUNTA DE LA UNIVERSIDAD DE CANTABRIA Y LA REAL ACADEMIA DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y FINANCIERAS
Excmo. Presidente de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras, Excelentísimos e Ilustrísimos Académicos, Investigadores, amigos y amigas, señoras y señores.
Es para mí una satisfacción presentar esta Sesión Académica conjunta entre la Universidad de Cantabria y la RACEF, bajo el título de “Los confines de la equidad y desigualdad en la prosperidad compartida”.
En estos momentos tan complicados e impredecibles, se hace más necesaria que nunca la colaboración entre instituciones, para de este modo, encontrar soluciones conjuntas a los nuevos desafíos y retos con que nos estamos encontrado.
La Universidad de Cantabria, como no podría ser de otra manera, ha puesto en marcha todo su potencial humano y tecnológico al servicio de la sociedad española y cántabra, para apoyar y aportar soluciones a esta crisis de la Covid-19. Desde el primer momento de la crisis, el Instituto de Biomedicina y Biotecnología de Cantabria y la Facultad de Medicina han proporcionado material de laboratorio y EPI, han colaborado en procedimientos de esterilización de mascarillas y, sobre todo, han colaborado con la participación de varios investigadores y técnicos en la realización de tests diagnósticos en esta pandemia. En este mismo sentido, la Facultad de Medicina alberga el punto de triaje del Sistema Cántabro de Salud destinado al personal de servicios públicos esenciales. El Instituto de Biomedicina y Biotecnología de Cantabria está ahora iniciando un proyecto de investigación relacionado con nuevas perspectivas terapéuticas frente al coronavirus.
Además de esta contribución clave desde el entorno biosanitario, desde otros ámbitos de investigación de nuestra Universidad en también se han emprendido diversas iniciativas, en particular desde el Instituto de Física de Cantabria que ha ofrecido los recursos de su centro de computación para estudiar la estructura molecular del Covid-19 y también está participando en un proyecto para estudiar la eficacia del confinamiento analizando datos masivos y de alta resolución.
Las universidades, en general, y la de Cantabria en particular, nos hemos tenido que adaptar igualmente a los nuevos retos que esta crisis nos ha planteado en cuanto a desarrollar tanto los modelos de enseñanza como también de evaluación en forma no presencial, a distancia. La inversión tecnológica realizada por la UC durante los últimos años ha permitido dar soporte a la formación a distancia y al teletrabajo, imprescindibles en los momentos actuales.
La economía se encuentra con diversos retos a los que las instituciones académicas y de investigación tenemos que dar respuesta. Espero que esa sesión académica de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras sea muy fructífera, y permita aportar ideas e iniciativas que puedan ayudar a que esta crisis mundial se solucione lo antes posible.
