Ana María Gil, Académica de Número y Bibliotecaria de la Junta de Gobierno de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras (RACEF), participó el pasado lunes en el ciclo "Ciencia y Tecnología: Perspectiva desde las Reales Academias", organizado por el Instituto de España en su sede madrileña, con la conferencia "La subjetividad en el nuevo pensamiento económico", en la que abordó el papel clave que la lógica difusa ha ejercido para analizar con rigor la toma de decisiones en las ciencias humanas, en particular en la Economía.
Para la Académica, "La realidad no es fácil de interpretar y para deconstruir su complejidad hasta la cadena de decisiones que la explican necesitamos de un instrumento de análisis e interpretación de su gradualidad. Y ese instrumento no solo existe, sino que lleva ya medio siglo de desarrollo: es la lógica 'fuzzy' o lógica difusa". En este sentido, destaco el legado que científicos e investigadores de los cinco continentes han ido afinando en una formidable red de cooperación investigadora su precisión durante más de medio siglo, lo que ha permitido elaborar teorías y modelos de análisis certeros, así como el desarrollo de algoritmos que hoy en día están en la base de la Inteligencia Artificial.
"Con las metodologías que se van desarrollando se hace posible llegar a cuantificar elementos, y por tanto sus relaciones de causalidad, con mucha más coherencia y representatividad. Así, a los modelos originales se incorporan técnicas de agregación, de ordenación, de parametrización, de hibridación, de ponderación..., tanto en el ámbito numérico como no numérico. Ello permite, por una parte, cuantificar fenómenos y variables antes imposibles de valorar. Por otra parte, explicar mejor las interconexiones entre los elementos y permitir una mejor coherencia en la explicación de los resultados", concluyó la experta..