José Daniel Gubert, Académico Correspondiente para Suiza de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras (RACEF), expuso el pasado 30 de noviembre, durante la segunda sesión del tercer Ciclo de Conferencias Internas de la Real Corporación el modelo de Gobierno de Suiza y sus ventajas respecto a otros modelos federales o confederales en la conferencia "Suiza: singularidades de un país singular (alguna podría inspirar, tal vez, a la España de la autonomías". La sesión se puede visualizar a través del canal corporativo de YouTube.

El Académico apuntó las tres fechas que resultaron clave para definir el actual modelo suizo: el año 1291, cuando tres comunidades establecieron una alianza para mejorar su seguridad y garantizar las rutas comerciales para firmar el documento fundacional de la confederación helvética; 1848, cuando los cantones confederados decidieron abandonar las confrontaciones militares para siempre y trabajar para mejorar su funcionamiento creando un Gobierno confederal único, y 1874, cuando se firmó la segunda Constitución, que conllevó la democracia directa y los cantones cedieron parte de su soberanía a Berna. Daniel Gubert destacó cómo en muchos estados federales y confederales el proceso ha sido a la inversa.

El modelo suizo de dos cámaras, que hasta que no alcanzan un acuerdo con mayoría cualificada no puede elevar ninguna propuesta al rango de ley, es otra de las características del modelo político suizo, señaló. Así como que en el seno del Gobierno estén representados de forma colegiada los cuatro partidos más votados, en busca del interés común. Los ministros son nombrados por el Parlamento, como lo es también el Presidente del Gobierno, cuyo cargo es rotatorio entre los miembros del Gobierno por un año. No existe ni un Jefe de Estado ni un Primer Ministro.

La estabilidad política y económica, su apuesta por la energía hidroeléctrica o la neutralidad ante cualquier conflicto bélico, mantenida en la actual guerra de Ucrania con la condena a la agresión rusa para evitar que Moscú aprovechase la estructura bancaria suiza, garantizan el bienestar en el país. El sentido de austeridad permite al país funcionar con una baja carga fiscal