La crisis de los mercados financieros se inició por causas macroeconómicas mundiales, pero la falta de reacciones apropiadas por parte de los bancos centrales y los supervisores para garantizar una mayor liquidez y seguimiento del crecimiento bancario hicieron posible la escalada de la crisis. Los objetivos de una inflación flexible ofrece espacios para la puesta a punto de la política monetaria para reaccionar ante la expansión crediticia y el incremento del precio de los bienes. No obstante es la supervisión el área principal que precisa modificarse. Junto a considerables mejoras en la regulación y supervisión de los mercados financieros se deben fortalecer las regulaciones macroeconómicas entre bancos centrales y supervisores. La conexión de los bancos centrales en contacto permanente con los mercados financieros así como su gran competencia para realizar análisis macroeconómicos, los convierte en candidatos naturales para hacerse cargo de la política de estabilidad macroeconómica ubicada entre la política monetaria y el sistema de supervisión.

Palabras clave: Crisis del mercado financiero, Política monetaria, Regulación y supervisión de los mercados financieros